sábado, 21 de septiembre de 2013




 OBSERVAR UNA CLASE EN LA UNIVERSIDAD “UCATECI”


Presentación del Tema La Comunicación en Ingles  

En un primer momento se hizo agradecimiento a Dios dirigido por un alumno.
Presentación de una reflexión en video y fotos sobre la Comunicación en ingles.
En el segundo momento se le formularon preguntas a los alumnos /as de la reflexión algunos alumnos respondieron.  Presentación del tema por el Facilitador Erick Álvarez sobre La comunicación en Ingles y trabaja con el tema.

En un tercer momento el profesor explica lo que es la comunicación y luego que expone hace o asigna algunos temas para hacer exposición en grupo de 4 para luego hacer una plenaria de trabajo y hacer preguntas a los distintos grupos sobre el tema.

El facilitador Erick tiene dominio de su Materia en Ingles y sobre todo del tema de la comunicación.

Utiliza recursos didácticos como es el proyector, computadora y todo lo que es tecnología también hace uso de radio entre otros recursos didácticos para el buen desenvolvimiento de la clase en consecuencia  mantiene a los alumnos permanentemente  activos.

 Al terminar la clase hace una retroalimentación de todo lo que dio de clase en el día.  Explica claramente los contenidos de una manera magistral también se autoevalúa  y evalúa a sus alumnos.




DENTRO DE LAS DIMENSIONES DEL DOCENTE UNIVERSITARIO

El  profesor Erick socializa  con todos sus alumnos /as la clase de ese día y busca proyectar que los alumnos resuelvan los problemas y soluciones posibles a conflictos sociales.

En cuanto a la dimensión didáctica, utiliza varios recursos lo cual lo pone en práctica y a disposición de los alumnos.  En la dimensión de valores, fomenta la responsabilidad y la confianza.
En lo  Personal, la facilitado es una maestro de lo que llamamos humanista el es  motivador de su propia práctica  docente, reflexiona sobre su entorno y aplica los correctivos en la misma clase.

En la dimensión institucional se afianza  a la institución y se considera parte de ella, está  comprometido con el centro educativo universitario UCATECI.




VITACORA



EL APRENDIZAJE.
A continuación se presenta una teoría del aprendizaje como un paso indispensable para diseñar métodos pedagógicos que resulten adecuados a la manera en que los seres humanos aprendemos.

La importancia de la memoria en el aprendizaje.
El aprendizaje ocurre como resultado de una modificación en la memoria, y por lo tanto habría la necesidad de definir qué es la memoria y cuáles son sus mecanismos de acción. El modelo tradicional de memoria del modelo de memoria dinámica, desarrollado por Roger Schank (1995). El conocimiento es como un conjunto de objetos que se guardan ahí para tomarlos cuando los necesitemos. Esta concepción de memoria iría acorde con la repetición de datos como medio de almacenamiento, y asumiría que, dado que los datos están guardados, pueden ser recordados en cualquier momento.

La memoria y su incidencia.
El proceso de construir y corregir las estructuras de conocimiento está guiado por las preguntas que nos hacemos a nosotros mismos. Las preguntas nos permiten detectar lagunas en nuestra memoria. Entre más preguntas nos hagamos sobre un tema, tenemos más índices para ese tema en nuestra memoria, por lo que será recordado con mayor facilidad. Las preguntas generadas internamente dirigen la memoria y aumentan el aprendizaje.

Formular preguntas nos lleva a pensar más profundamente sobre los nuevos datos, lo importante es tener un lugar en la memoria para colocarlos.  La memoria taxonómica puede recordar listados de datos que nos esforzamos en grabar en nuestra mente a través de la repetición o de algún recurso mnemotécnico.


LAS COMPETENCIAS DEL PROFESOR UNIVERSITARIO
Los estudios  que se han realizado sobre competencias  docente tiene como objetivo identificar las características de un profesor eficaz, sus rasgos de personalidad  y las premisas más  importantes son las del  el ámbito cuantitativo y cualitativo que demuestran que los cuestionarios son muy fiable en consecuencia la tarea del docente es multidimensional.

Factores de la competencia del docente.

1.      Dominio de la asignatura que es la condición necesaria para un docente de calidad.
2.      Didáctico técnico, donde la programación, organización, evaluación  y el uso de recursos didácticos metodológicos favorecen la claridad de la exposición  y desarrollo de la materia.

3.      Comunicación con el alumno que es un  aspecto relacionado con el anterior, pero con el énfasis puesto en la consecución de una adecuada comunicación con el alumno, a nivel grupal y a nivel individual.
4.      Personal  motivacional: Factor sin duda relacionado con el anterior y que influye enormemente en la claridad expositiva.
5. Evaluación
6.  Organización y recursos.
7. Presentación del contenido y dominio.
8. Valoración  global del curso.


viernes, 6 de septiembre de 2013

ATRÉVETE A SOÑAR…! SAL DE TU ZONA DE CONFORT!



ATRÉVETE A SOÑAR…!                     

Para alcanzar nuestros sueños y cumplir con nuestros propósitos es importante estar preparados para aceptar las oportunidades de aprendizaje y cambio y dispuestos a salir de nuestra zona de confort.
Hace unas semanas escribí algo de este tema sobre la importancia de la actitud frente a los cambios  externos  y otro sobre la importancia de atreverse y enfrentarse a los miedos para lograr nuestros sueños. Este video da algunas claves sobre cómo salir de la zona de confort y atreverse a soñar.

Quiero empezar compartiendo un vídeo motivador, creado por Inknowation, que presenta con mucha claridad nuestra capacidad para soñar y ser creativos,  para  innovar, cambiar nuestras vidas y  transformar nuestras empresas.

El vídeo te invita a que te atrevas a soñar otra vez, a desafiar tu zona de confort, y a que disfrutes del placer de convertir tus sueños en realidad. ¿Te atreves a soñar?   

¿Qué es exactamente la “zona de confort”?

La zona de confort es el conjunto de ambientes y comportamientos con los cuales nos sentimos seguros, donde no hay riesgo. Es un acondicionamiento mental que nos determina y condiciona a operar dentro de un marco de barreras mentales que no son reales.

Todos tenemos una zona de confort que precisamente tenemos porque estamos a gusto, estamos adaptados a ella, además en ella tenemos un mínimo grado de eficacia, si no, no la mantendríamos.
Sin embargo, si continuamos sin salir nunca de esta zona, van a seguir pasándonos exactamente las mismas cosas: vamos a dejar de aprender, a dejar de movilizar recursos personales, a no aprender conductas nuevas que podamos necesitar. Dejaremos de crecer.


PREGUNTAS PARA LA REFLEXIÓN





LA PRACTICA DOCENTE Y SUS DIMENSIONES

IDENTIFIQUE UNO O DOS EPISODIOS DE SU VIDA LABORAL COMO PROFESOR




Mi nombre es NICOLAS CAPELLAN GENAO egresé de la Universidad UCATECI, mi plaza me la otorgaron en San Martín de Porres, al ingresar a la escuela  me enfrenté a un cambio muy drástico.

Inicié trabajando en una comunidad llamada San Martín,  la escuela es de alto riesgo por su ubicación donde se encuentra y de muy bajos recursos, nunca imaginé que tendría que tratar con niños que tienen relación con personas que están relacionadas con la delincuencia, esperar que el agua baje de las calles en tiempo de lluvias, ver como los jóvenes, adultos y los niños trabajan en puntos de drogas, peleas en las calles con diferentes bandas, en el centro educativo con bandas juveniles trabajadas desde los puntos de drogas. Niños de la comunidad que estudian en la escuela hablando de puntos de drogas,  otra situación a la que me enfrenté era trabajar con niños de (1°, 2° y 3° grado) que solamente te hablaban de la situación que Vivian sus padres.

Al principio deseaba no seguir dando clase pensando que no tenía necesidad de pasar por esto, sobre todo porque no  había seguridad y a veces o casi siempre había pleitos en la comunidad o la escuela.

Conforme iba pasando el tiempo me fui dando cuenta de las necesidades de la comunidad, el trato de la gente y el de los niños me hicieron ver que mi verdadero trabajo estaba ahí y que todo lo demás no era importante y tan significativo como el apoyar a una comunidad con tantas necesidades, mi compañeros /as y yo logramos que los niños fueran mejorando en la disciplina, el respeto hacia los demás y que los padres visitaran mas la escuela para ver como iban evolucionando sus hijos /as en cuanto a lo académico y las pandillas que se habían formados,  había muchos proyectos en puerta para la comunidad, estaba muy olvidada y deseábamos trabajar para sacarla adelante.

Eran muchas experiencias buenas y malas pero de esa manera aprendí a valorar más mi trabajo y la razón por la cual había elegido estudiar la carrera de docente, al principio sentía que sólo jugaba a la” escuelita”, pero el tiempo me fue enseñando el verdadero valor y compromiso de esta profesión.

Siempre deseé estudiar para ser maestro y las satisfacciones que he tenido hasta este momento han sido muchas, considero que es una profesión donde cada día  aprendo, sobre todo de las malas experiencias y revaloro todo lo bueno que contribuye a ser  parte de mi formación docente, me gusta aprender y enfrentarme a nuevos retos como a los cambios que surgen para mejorar la calidad de  la educación.

Al principio como todo nuevo cambio se presentan muchas dudas, pero son más las expectativas, de las cuales  me trazado el objetivo de mejorar siempre mi trabajo planeando actividades en las que los alumnos se sientan atraídos por realizarlas, observándolos y ver cuáles son sus necesidades de aprendizaje.

Ha sido muy importante para mí considerar el aspecto afectivo y la relación maestro-alumno, anteriormente me daba mucho trabajo corresponderles un abrazo, cantarles, contarles un cuento, fui aprendiendo lo importante que es para un niño /a ese lazo afectivo, me daba cuenta que muchos tenían la necesidad de esa atención que en casa no tenían y que la escuela era un espacio donde podían aprender a tener confianza, siempre y cuando uno como maestro contribuyera para lograrlo.

Nunca he visto mi labor docente como un “trabajo” disfruto de él por todas las satisfacciones personales que he tenido, me siento comprometido para seguir superándome en todos los aspectos. Pero sobre todo con la plena convicción de que no podría dedicarme a otra cosa que no sea algo en relación a la docencia.







¿QUÉ CARACTERÍSTICAS DE MI INSTITUCIÓN INFLUYEN EN MI PRÁCTICA DOCENTE?

La escuela es de organización completa y la relación entre la autoridad educativa con el personal docente con el tiempo se ha afianzado permitiendo una relación solidaria, creando un buen ambiente laboral propiciando un mejor  desarrollo de la práctica educativa.

Hay mayor organización en la realización de las diferentes actividades y a su vez el compromiso para realizar cada una de ellas tratando de volver de involucrar a los padres de familia en los diferentes eventos que se planean de manera general o particular de cada grupo.

Anteriormente la relación entre padres de familia y la autoridad educativa era demasiada conflictiva y a su vez como personal nos veíamos afectados ante tal situación ya que muchas veces  no sólo era con el director sino de manera general.

El ambiente y las diferentes situaciones que se presentan originan que se siga perdiendo la confianza a la institución  las nuevas disposiciones por el director no son aceptadas del todo  (cumplir con el uniforme, respetar la hora de entrada, tratar asuntos con padres de familia a cierta hora), ha provocado que la comunicación sea muy limitada y el respeto hacia los maestros se vaya perdiendo. El reconocimiento de algunos padres de familia hacia mi trabajo me motiva a continuar comprometiéndome cada vez más a mi labor educativa superándome tanto en el aspecto profesional como personal.





¿CÓMO EL CLIMA ESCOLAR DE MI INSTITUCIÓN INFLUYE EN MI PRÁCTICA DOCENTE?

Tengo 17 años de servicio, los cuales he trabajado en la misma escuela, he visto jubilarse a la mayoría de los maestros pioneros de esta Institución, la relación con ellos era muy buena, a pesar de que llevaba muy pocos años de servicio a comparación a ellos, me pude integrar a su “círculo social”, estaban acostumbrados a convivir mucho dentro y fuera de la escuela, aprendí mucho de ellos, había una competencia muy sana de trabajo la mayoría del personal era muy responsable, había mucho apoyo por parte de los compañeros pero sobre todo nadie se metía con nadie, había ciertas diferencias personales pero no pasaban de ahí, siempre hubo mucho respeto de manera general y eso generaba un ambiente escolar muy positivo, situación que ya no se dio cuando hubo cambios de directores y de nuevos compañeros, originando que la escuela fuera considerada como de “paso”.

En los últimos seis años la mitad del personal ha venido de otros punto de la ciudad, por lo que algunos de ellos eran comprometidos y dejaban a los grupos con muy buenas bases, otros eran demasiado irresponsables y dejaban mucho que desear en el desempeño de su trabajo lo que fue originando que la escuela perdiera la proyección que antes tenía, se dejaron de hacer muchas actividades que ayudaban a integrarnos como equipo de trabajo, cada quien veía por sus propios intereses dejando de lado el verdadero objetivo de la Institución.

 Actualmente la mayoría de los compañeros buscamos la manera de apoyarnos mutuamente para minorar estas situaciones, demostrando interés y compromiso por realizar nuestro trabajo con responsabilidad haciendo lo que a cada quien le corresponde.  El reconocimiento de los padres de familia hacia mi trabajo me motiva a continuar comprometiéndome cada vez más a mi labor educativa superándome tanto en el aspecto profesional como personal.


¿QUÉ DEMANDA ACTUALMENTE LA SOCIEDAD AL QUEHACER DOCENTE Y QUE ME IMPLICA A ELLO A MÍ PERSONALMENTE?

La educación como fenómenos social, tiene una tarea muy difícil que se debe cumplir y es en el aula el lugar indicado para transformar a los educandos que son el presente y futuro de nuestro país con la participación de los docentes y padres de familia.  Es necesario que como docentes adoptemos una responsabilidad ética y profesional necesaria para formar personas con el perfil necesario para enfrentar diversas situaciones. El trabajo educativo juega un papel muy importante en la formación y educación de cada persona, no se trata de cumplir o agotar los planes de estudio que requiere el Ministerio de Educación es contribuir a un cambio para una transformación educativa. El padre de familia debe apoyar las actividades pedagógicas con la finalidad de alcanzar la tan anhelada reforma educativa por lo que el Ministerio de Educación, el Estado Dominicano junto con otras instituciones a fines, están implementando estrategias que ayuden a involucrarlos en la educación de su hijo para que logre una educación integra.






¿CUÁLES SON LOS DOS VALORES MÁS IMPORTANTES QUE CREO ESTAR FORMANDO EN MIS ESTUDIANTES MEDIANTE MI PRÁCTICA COMO DOCENTE? EJEMPLIFIQUE EN PRÁCTICAS CONCRETAS CÓMO LOS FORMA MÁS ALLÁ DE LOS “DECIRES”

Uno de los valores que estoy fomentando en  mis alumnos es el respeto y honestidad es enseñar a los niños a ser cuidadosos de que sus acciones no lastimen o perjudiquen la dignidad y los derechos de los demás.

La honestidad es estimular el respeto por la verdad en sus palabras y en sus acciones.

La manera en como lo realizo es explicarle que es el respeto y la honestidad poniendo ejemplos relacionados con situaciones que pasan dentro del salón de clases, así como leerles algún cuento relacionado a esos dos valores sin dejar a un lado los demás, pero sobre todo lo más importante es ser el ejemplo de ellos.












viernes, 30 de agosto de 2013

LA COMPETENCIA DEL PROFESOR UNIVERSITARIO






La universidad, lugar donde el profesor universitario desarrolla su trabajo, está en uno de los mayores momentos de transformación de su historia; algunos de estos procesos han sido provocados directamente por los cambios sociales que se están sucediendo, otros por la tendencia al “rendimiento de cuentas” que se está instaurando en el sector privado y otros.

Estos profundos cambios por la calidad y la internacionalización que está viviendo la universidad, conllevan alteraciones en las funciones, roles y tareas asignadas al profesor, exigiéndole a este el desarrollo de nuevas competencias para desarrollar adecuadamente sus funciones profesionales.

Todo ello ha generado nuevas necesidades formativas, provocando esto el desarrollo de planes formativos pedagógicos específicos para este colectivo; siendo imprescindible definir el nuevo perfil competencial que debe atesorar el profesor universitario para desarrollar adecuadamente sus nuevas funciones, en los diferentes escenarios de actuación profesional.

En este artículo se presenta un perfil competencial del profesor universitario.



  • Un cambio de paradigma educativo (pasándose de centrar la atención en la enseñanza y en el profesor a centrarse, ahora, en el aprendizaje y el alumno)

  • Unos cambios estructurales (en la universidad, nuevo diseño curricular modular e interdepartamental, etc.)

  • Y unos cambios sustantivos (relacionados con los dos apartados anteriores, como por ejemplo: revisión de los objetivos de aprendizaje en términos de competencias, revisión de los conocimientos de cada título, cambio de la concepción docente y de culturas profesionales arraigadas, revisión de las metodologías utilizadas, nuevos modelos de evaluación, etc.).


A partir de los años 90 se ha iniciado un importante debate sobre la necesidad de llevar a cabo profundas transformaciones cuantitativas y cualitativas en la educación superior como respuesta a las nuevas demandas económicas, sociales y educativas.

Aspectos tales como la apertura de los mercados, la internacionalización de las economías, la globalización y la diversificación de los sistemas productivos, reclaman a las instituciones de educación superior formar graduados preparados para actuar en un entorno cambiante, donde las competencias profesionales se presentan como factores distintivos de la calidad de la formación.

Race (1998) plantea cuatro factores que interactúan y están provocando un cambio acelerado en el planteamiento de la formación superior:
  • La explosión del conocimiento: alta velocidad y cantidad de generación y a la vez, obsolescencia del mismo.

  • La revolución en las comunicaciones, caracterizada por una cada vez más masiva presencia de las tecnologías de la información y la comunicación en la enseñanza superior.

  • El rápido incremento del conocimiento sobre cómo se aprende de una manera efectiva.

  • El fortalecimiento (empowerment) del que aprende como consecuencia del cambio de paradigma: de la docencia al aprendizaje.


Según Rodríguez Espinar (2003) algunos analistas aseguran que no ya cambios, sino mutaciones que harán irreconocible la universidad del siglo XXI. Asimismo, en un contexto que parece dominado por la máquina tecnológica emerge, una vez más, la figura del profesor/a universitario como columna central del nuevo edificio, si bien éste deberá, como otros muchos profesionales, reconstruir una identidad profesional que se adapte a los nuevos papeles y funciones que desarrollará en los nuevos escenarios de actuación.

Los profesores, como facilitadores del aprendizaje, deberán familiarizarse con los distintos métodos docentes para aplicarlos en sus áreas específicas. El abanico de posibilidades es amplio y requiere una reflexión para decidir el método que se adecúa a cada asignatura dentro de un sistema más interactivo.

Ciertamente, el perfil profesional del docente universitario del siglo XXI se ha de volver más complejo.

Rodríguez Espinar (2003) considera que un buen profesor universitario habrá de reunir las siguientes competencias:
Dominar tanto el conocimiento de su disciplina como la gestión del mismo.
Innovar sobre su propia práctica docente, lo que implica reflexionar e investigar integrando el conocimiento disciplinar y el pedagógico como vía para la mejora continua.

Dominar las herramientas relacionadas con el currículo (diseño, planificación y gestión del mismo).

Saber favorecer entre los alumnos un clima de motivación hacia un aprendizaje de calidad.

Saber trabajar en colaboración con colegas y potenciar el aprendizaje colaborativo entre los alumnos.

Poseer las habilidades comunicativas y de relación que la función docente requiere.

Estar comprometido con la dimensión ética de la profesión docente.
En cuanto a los estudiantes, el principal reto es que éstos asuman la responsabilidad de su propio aprendizaje y que aprendan a aprender.

En una primera fase, será necesario que las universidades les ayuden de forma explícita a aprender cómo facilitar su tiempo, a trabajar en equipo, a adoptar técnicas de comunicación efectiva o dominar otras lenguas distintas de la materna.

En su función de guía y apoyo, será fundamental que el profesorado asuma un papel activo a la hora de convencer a los alumnos de la necesidad de su implicación y los beneficios personales y profesionales que ésta supondrá.

Se ha demostrado que este tipo de cuestionarios son muy confiables para obtener información sobre las características de la competencia docente, “ya que el alumno es el más directo observadorde las habilidades del profesor” (Muñoz San Roque, 2004: 322).

La tarea docente es multidimensional; hay factores que se pueden medir y factores que no se pueden medir, por lo que sería equivocado concluir que a través de un cuestionario están suficientemente identificados los aspectos cognitivos y afectivos que se ponen en juego en el proceso enseñanza-aprendizaje.
Por otra parte, Barnett (2002) argumenta que la universidad se enfrenta a la supercomplejidad, en la que se ven continuamente desafiados los propios marcos de comprensión, acción y autoidentidad.

Es decir, la educación superior tiene que atender a la acción. Una educación superior que se limitara al dominio del conocer, dejaría a los graduados en situación de vulnerabilidad en el ámbito de la acción. Además, desarrollar la autoidentidad de los estudiantes tendría como resulta una estrategia pedagógica insuficiente.

Es decir, varios expertos reflejan en sus escritos y ponencias en diferentes entornos, la necesidad de impulsar la implementación de nuevos modelos universitarios, con planes curriculares actualizados y metodologías de enseñanza-aprendizaje sometidas a revisiones y modificaciones continuas, donde el papel del docente debe afrontar cambios muy significativos en su accionar

García Ramos (1997: 384) hace una excelente síntesis de las dimensiones de la competencia del profesor universitario extraídas de diversas investigaciones:

1. Dominio de la asignatura (condición necesaria, aunque no suficiente para una docencia de calidad).

2. Didáctico-técnica: programación-organización, evaluación y uso de recursos didáctico-metodológicos que favorecen la claridad de la exposición y desarrollo de la materia.

3. Comunicación con el alumno: aspecto relacionado con el anterior, pero con el énfasis puesto en la consecución de una adecuada comunicación con el alumno, a nivel grupal y a nivel individual- personal. Un adecuado clima de relación
profesor-alumno.

Finalmente, Avecedo (2003) propone un modelo de competencia docente compuesto por los siguientes factores:

1. Entusiasmo del profesor.
2. Interacción con el alumno.
3. Evaluación.
4. Organización y recursos.
5. Presentación del contenido y dominio.
6. Valoración global del curso.

Según Villa y Morales (1993), el trabajo del profesor engloba distintas dimensiones, vividas desde situaciones y momentos diversos del trabajo docente:

1. Cualidades personales.
2. Competencias docentes:
• Comunicación con los estudiantes.
• Organización y conocimiento de la materia.
• Reflexión en el ámbito docente.
• Relaciones interpersonales con los estudiantes.
• Evaluación de la enseñanza.
3. Actuación del docente en el aula.
4. Experiencias de aprendizaje de los alumnos.
5. Resultados de aprendizaje o eficacia.






Entre las muchas conclusiones de los estudios de medición de la competencia docente se ha encontrado que, respecto a los rasgos de personalidad o valoración de las cualidades del profesor, los profesores más valorados por los alumnos son aquellos que se muestran más humanos, es decir, más cercanos y con mayor facilidad para relacionarse con los alumnos, más afectuosos y democráticos. No se trata de conductas específicas que se producen sólo en el aula, sino que son parte integral del modo de ser del profesor. A estos factores se les llama indicadores de presagio (García Ramos y Congosto, 1996: 127).


NICOLAS CAPELLAN GENAO
97-0385